Eduardo Jáuregui en su novela el yoga al siciliano presenta a su protagonista, Lisa Vogel, un dirigente que vive en Francfort, divorciado y muy solicitada por el trabajo y la atención a su Padre con la enfermedad de Alzheimer de forma que solo rilassa la práctica del yoga. La vida cambia cuando se recibe en herencia de un italiano con una casa cerca del mar la ciudad siciliana de Santa Catalina. Lisa está desplazado allí y está trabajando para la reforma de la casa en venta, así como a convertirse en profesor de yoga. En la isla es muy a gusto entre sus pueblos; además cae en amor con alguien cuya peligrosa tendencia las complica la existencia y Lisa está implicado en el turbio y veinte cuestiones relacionadas con un importante texto de la filosofía yogiche. El tema se entrelaza una historia con una historia sentimental que participa también del género aventura. Con una prosa sencilla y caracteres bastante convencional, el autor plantea la novela en una atmósfera que fue presidida por diferentes ejercicios de yoga, descrito en ocasiones con la sensualidad. A lo largo de la narración es patinar comentarios antirreligiosos en adición de erotismo y el permisivismo previsible dado el tema tratado.